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sábado | 1 marzo | 2025
Las peticiones de los comerciantes para que se reinstaurara la ORA en la calle San Andrés y la nueva iluminación de la iglesia castrense centraban buena parte de los contenidos del periódico del 1 de marzo del año 2000. En 1975, las noticias de tal día como hoy se centraban en la permanencia de la flota pesquera en A Coruña en lugar de ser trasladada a Vigo mientras que El Ideal Gallego de hace 75 años se centraba en la figura de Emilio Romay, al que la Diputación nombraba hijo predilecto de la provincia y proponía darle su nombre a la casa cuna. La homenajeada en 1925 era la periodista Sofía Casanova, a la que el Ayuntamiento felicitaba por recibir la distinción de una gran cruz y se apuntaba a cualquier suscripción popular en su favor.
Los comerciantes de la calle de San Andrés solicitan al Ayuntamiento que implante de nuevo la ORA, que se eliminó con motivo de las obras del Paseo Marítimo y todavía no se ha restablecido. En opinión de los vendedores, este sistema permitirá mejorar las condiciones de aparcamiento en la calle y redundará en un aumento de las ventas. También se quejan de la supresión de varias paradas de autobús y solicitan que se refuerce la vigilancia policial. También en San Andrés, la iglesia castrense dispondrá de un nuevo sistema de iluminación ornamental, similar al que ya existe en la fachada de Santo Domingo, en el palacio municipal o en la sede de la Capitanía General. Las directrices del Pepri de la Ciudad Vieja y Pescadería marcan como uno de sus objetivos ampliar la iluminación artística a todos los rincones del casco histórico. También se ampliarán los puntos de luz en zonas como Feáns o Someso. Los presupuestos municipales incluyen una partida de 31 millones de pesetas para financiar la iluminación de la iglesia castrense y mejorar el alumbrado en la avenida de Finisterre, Concepción Arenal, el barrio de Los Pelamios y la antigua carretera de Pastoriza.
Los pesqueros coruñeses ya no irán a Vigo. Había sido anunciada la última subasta de pescado en la Lonja coruñesa para este 1 de marzo. Porque los pesqueros habían recibido ya órdenes de trasladarse a Vigo y no a La Coruña. Algunas bacas ya regresaban del Gran Sol y tenían prevista su llegada a Vigo con vista a celebrarse el lunes la primera subasta de pescado, pudiéramos llamarle coruñés, en el Berbés. El jefe del Sindicato Provincial de pesca, señor García Ramos, y el presidente del Grupo de Grandes Arrastreros señor Freire Vila, acompañados de varios componentes del grupo se entrevistaron con el gobernador civil, pero ignoramos lo que en su despacho se habló porque todos ellos guardan un silencio absoluto. Lo que sí es cierto es que la medida tomada por ellos de suspender los acuerdos de enviar la flota pesquera coruñesa a otros puertos fue divulgada tras la reunión con la primera autoridad civil. Las subastas proseguirán como hasta ahora y las bacas del Gran Sol y del día retornarán al puerto coruñés, lo que nos llena de satisfacción porque así los trabajadores de la “coya” del pescado podrán seguir manteniendo a los suyos, al igual que camioneros y vendedoras.
A propuesta del señor Gila Lamela, en sesión extraordinaria de la Diputación Provincial, se acordó dar el nombre de don Emilio Romay a la Casa Cuna de La Coruña; nombrar al fallecido presidente hijo predilecto de la provincia y encargar a un artista un retrato al óleo del señor Romay para ser colocado en el salón de sesiones o en el despacho de la Presidencia.
Informaba también el diario de las quejas de los vecinos de la Gaiteira por la higiene, después de pasar más de un mes con los registros del alcantarillado obstruidos. Este pequeño barrio, de unos mil cien vecinos, linda con la Cubela, Montiño, Castrillón y la carretera general de Madrid. Pertenece al municipio desde 1906, ya que antes formaba parte del de Oza. No tienen ninguna escuela aunque hay alguna proyectada en la zona del Montiño.
El alcalde, Victoriano Suances, informó a la comisión permanente de que a nuestra ilustre paisana Sofía Casanova se le había otorgado la alta distinción de concederle una gran Cruz, y después de exponer el deber del Ayuntamiento ante este caso, se acordó telegrafiar a la ilustre dama felicitándola por tan honrosa distinción y contribuir caso de llevarse a cabo la idea de regalarle las insignias por suscripción popular y adherirse y cooperar a todo homenaje que se dedique a tan insigne gallega.
Otro obsequiado fue el general de artillería Antonio Durán Loriga, agasajado por amigos con una comida íntima con motivo de su reciente ascenso a general. Asistieron a esta comida como organizadores el capitán general López Pozas, el ayudante García Bofill, el gobernador interior Cebrián, Francisco Hervada y Vizoso.
