Los presidentes de la Corporación Hijos de Rivera, Altia y el Grupo Aluman, empresas accionistas de Cesuga, solicitaron ayer que esta institución sea “la universidad de las empresas”. En su reclamación pidieron que el centro dejase de estar adscrito para convertirse en universidad privada de pleno derecho. Las declaraciones surgieron durante la presentación del Club Alumni Cesuga, red conformada por sus antiguos estudiantes.
“Queremos una universidad que ayude a hacer más grande Galicia, ni mejor ni peor, sino con un modelo educativo diferente”, declaró Venancio Salcines, presidente del Consejo Rector de Cesuga: “Es más fácil crear una central nuclear que una universidad privada en Galicia. Pero somos gente emprendedora y no vamos a cejar en el empeño”.
Ignacio Rivera, presidente de Hijos de Rivera, calificó de “vergonzoso” que Galicia sea una de las dos únicas comunidades autónomas sin universidad privada propia e insistió en la necesidad de contar con una “alternativa a la pública”. Este directivo responsable de marcas como Estrella Galicia aseguró que el planteamiento de su proyecto consiste en crear algo distinto “para que los jóvenes estudiantes vengan y poder generar así una cultura diferente”.