El lotero que repartió 162 millones de euros en la Lotería de Navidad, Pablo Seivane, asegura que las ventas para el Sorteo del Niño van “como un cañón”. En su administración de Rúa Nueva, El Filón de Oro, el hecho de haber dado el segundo premio el 22 de diciembre ha provocado un movimiento constante de personas que acuden al local en busca de la suerte. “Haber dado el premio nos ha hecho duplicar las ventas. Literalmente son el doble de las de Navidad”, explica el lotero.

Lo más curioso, señala, es que los consumidores ya no demandan ningún número en especial. “Se fían de nosotros y nos dicen ‘dame el que tú quieras”, añade. Sin embargo, algunos siguen tradiciones o modas, como es el caso de los que compran el número 01906, haciendo referencia al año de la fundación de Hijos de Rivera y del Deportivo. Este jueves eran varias las personas que preguntaban por este número. 

Pablo Seivane tiene su negocio empapelado con premios repartidos durante los últimos años, pero el más importante es el de hace justo dos semanas. “Es el premio más importante que hemos repartido desde que estamos aquí, desde 1987”, afirmó el responsable de la administración.

Navidad

En la Lotería de Navidad 450 décimos fueron para la protectora de animales Gatocan y 173 para la Asociación de Amas de Casa de la ciudad. El Gordo también dejó alegría en la ciudad. Un décimo agraciado con el gran premio se vendió frente a la playa de Riazor. En el número 10 de la avenida de Buenos Aires, la tienda de gominolas de Sara Carballo, se dieron 400.000 euros.
Os Mallos, Cuatro Caminos y la ronda de Nelle fueron otras zonas que brindaron el 22 de diciembre, en este caso por el Quinto Premio. Los coruñeses no pierden la esperanza y confían en que el 6 de enero dé la misma fortuna.