La mano de obra ‘importada’ para la hostelería de A Coruña no tiene dónde dormir

La mano de obra ‘importada’ para la hostelería de A Coruña no tiene dónde dormir
La mano de obra en hostelería no cubre las necesidades del sector, aseguran los empresarios | Patricia G. Fraga

Lograr la felicidad completa en un sector como la hostelería es prácticamente una quimera, ya que en la ecuación entre volumen de clientes y facturación final existen varios peajes por el camino que le van borrando la sonrisa de un plumazo al hostelero. Y es que, si bien la buena salud de la que goza la mayor parte de bares y restaurantes debería ser un input positivo, la sensación creciente entre sus responsables es de preocupación por no poder dar servicio a esa demanda. Con la Semana Santa instalada en la agenda de este mes y el verano en el horizonte, regresa una carencia cada vez más recurrente: la de la mano de obra.


Son varias las fórmulas con las que los hosteleros intentan llenar el vacío laboral, pero ninguna parece resolver una problemática que, según dicen, lejos de aliviarse, crece. Ni la actualización del convenio, ni la cada vez más prolífica cantera procedente de la Escuela de Hostelería o programas como el Retorna de la Xunta son suficientes para surtir a uno de los motores económicos de A Coruña. Y para el presidente de la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería, Héctor Cañete, la problemática es cada vez más una amenaza. “El pasado verano fue bueno, este también va a serlo y se aproxima la Semana Santa, la primera gran parada de la a temporada, pero cada vez se nos hace más complicado encontrar trabajadores”, lamenta el hostelero. “Es muy difícil cubrir las necesidades con nuestra escuela, porque la demanda es muchísima y la formación de los alumnos se realiza a largo plazo”, añade Cañete.


Casa y trabajo

Una aventura por la que apostaron muchos trabajadores de hostelería durante años fue coger las maletas y cubrir esas necesidades de mano de obra en Ibiza. Atraídos por sueldos que, como mínimo, triplicaban los que se encontraban en la península, vieron cómo debajo de esa atracción radicaba otro problema: los hospedajes encarecidos por la gentrificación y el turismo. Algunos hosteleros optaron por incluir en la oferta de trabajo una habitación donde dormir, una medida que funcionó y que se implantó poco a poco en los sitios más demandados de España. La idea había llegado hasta A Coruña y se incluyó, por ejemplo, para los beneficiarios del programa Retorna. Y entonces llegó el choque con la realidad. “Apostamos por hacer eso y nos resultaba totalmente imposible, ya no por el precio, sino porque los propietarios no nos alquilaban los pisos”, asegura Cañete. “Directamente no te daban la opción”, prosigue.


La prioridad es solicitar una ampliación de Retorna para seguir reclutando profesionales que alivien el mayor quebradero de cabeza para un sector que también acusa al incremento de la bolsa de la compra. “En las reuniones que mantuvimos con Rueda fue una de las peticiones”, finaliza el hostelero. 

La mano de obra ‘importada’ para la hostelería de A Coruña no tiene dónde dormir

Te puede interesar