Durante todo el fin de semana, los aficionados al tatuaje se han podido acercar al Hotel Attica 21 para disfrutar del arte de algunos de los mejores tatuadores de España. Y si querían (y eran mayores de edad) podían tatuarse. E incluso menores, si estaban acompañados de un tutor. Algunos pidieron cita con un artista en concreto. Otros, buscaron uno en los cerca de 50 que se habían dado cita en el salón y que exhibían sus diseños listos para plasmarlos en la piel. 

Cientos de personas han pasado por la sala, lo que supone un buen resultado para un evento que ha vivido su primera edición, gracias al esfuerzo de dos miembros de Front Line Tatoo, Raquel Barbetio (anilladora) y Marko González, tatuador y fundador del estudio, que agradecieron la ayuda de Atlántica Tattoo.
 

Por todo el recinto podía verse gente semidesnuda enseñando en sus rostros, espaldas, pechos, brazos y piernas verdaderas obras de arte: rostros demoníacos, bellas sirenas, águilas, atrevidos tribales, muchos de una complejidad asombrosa. Solo el tiempo dirá si Old Navy Tattoo celebra una segunda edición en A Coruña o si se queda en un hecho aislado pero no cabe duda que a muchos les ha dejado un recuerdo indeleble