Los niños del Materno de A Coruña pueden ir a ver el circo sin salir del hospital

Trapecistas, elefantes africanos, magos y hasta un rey coreano se pueden encontrar en el diorama con más de 300 clicks que decoran una de las salas de espera del Teresa Herrera
Los niños del Materno de A Coruña pueden ir a ver el circo sin salir del hospital
Javier Penas, junto a su obra y parte de su colección personal | Patricia G. Fraga

Las esperas en el hospital se hacen más amenas si puedes aprovechar para ir a ver el circo. No es un decir y no hay que ir demasiado muy lejos para encontrarlo. En una de las salas de espera de Pediatría del Hospital Materno Infantil se encuentra un diorama de más de 300 clicks de Playmobil que hará viajar a todo aquel que se acerque al mundo del Roncalli alemán de los años 90


No se trata de un circo cualquiera. Aquellos que entiendan se quedarán boquiabiertos al ver sus exclusivas piezas, algunas casi imposibles de encontrar en el mercado actual. “Lo que es más llamativo es la carpa porque no existe como tal. Playmobil te vende una mucho más pequeña pero aquí están combinadas varias para hacerlo más grande”, explica el autor de la obra y miembro de la asociación Playmogalicia, Javier Penas Vázquez. 


Los tres elefantes blancos que coronan la pista también son muy especiales, pues se trata de figuras de los años 90 de las que se produjeron muy pocas. Entre trapecistas, magos, payasos y hasta una familia de forzudos, uno se podría pasar horas buscando los pequeños detalles que forman la espectacular muestra. Hay incluso un rey coreano entre el público, un click que solo se vende en su país de origen. 

 

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Las pistas del circo con los tres elefantes blancos / Patricia G. Fraga


También hay unas caravanas y un camión que pertenecen a una edición especial que sacó Playmobil en el año 2016 para celebrar el aniversario del circo Roncalli, aunque su creador reconoce que los niños ni se fijan en estos detalles.

 

Aficionado desde niño

Todas las figuras del diorama del Materno forman parte de su colección personal, que empezó siendo un niño y retomó de adulto, ya en la pandemia. “El circo que yo represento es el de los 90 pero también fue el que sacó Playmobil en esas fechas cuando yo era niño. Coincidió también con la época dorada de Playmobil. A los que nos gusta, consideramos que son las más bonitas”, asegura Javier Penas.

 

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Un mago en plena acción / Patricia G. Fraga


Detrás de este circo hay un día y medio de planificación y montaje, la gran mayoría adelantado en su casa. “Lo que hay expuesto es una octava parte de lo que monté la Feria de Playmobil de Curtis, en noviembre. El del hospital es de 1,8 por 70 centímetros y el otro era de dos por cuatro metros. Tengo mucha más colección de circo de lo que está ahí”, asegura el coleccionista.


Este diorama forma parte de una iniciativa de Playmogalicia para humanizar los hospitales y amenizar las largas esperas, tanto de niños como de padres. “Es una manera de distraerse y creo que tienen también un componente educativo”, explica Penas. 

 

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Los feriantes en el exterior de la carpa / Patricia G. Fraga 


Su obra se podrá visitar hasta finales de febrero, ya que la urna se renueva cada dos meses. En marzo, se dará paso una nueva temática que promete ser igual de espectacular. 

Los niños del Materno de A Coruña pueden ir a ver el circo sin salir del hospital

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