En la noche del viernes al sábado tuvo lugar una importante intervención por parte de la Policía Local en el polígono de Vïo, que desde hace años se ha convertido en un punto de reunión para los amantes del motor, que echan carreras por las amplias avenidas y rotondas, para molestia de los vecinos, que se quejan de que las autoridades no actúan. La noche del viernes, unas doscientas personas se concentraron para disfrutar de la exhibición, uno de los conductores llegó a volcar en una rotonda, aunque salió ileso, pero no fue el único sobresalto que se vivió: a la salida les esperaba la Policía Local, que multó uno a uno a todos los conductores. En total, más de cien multas que suman unos diez mil euros, según fuentes municipales.
Para todos fue una sorpresa: hasta ese momento, la Policía Local había podido hacer poco o nada contra estos locos de los coches, a menos que les sorprendieran in fraganti conduciendo a gran velocidad: cuando acudían los coches patrulla del 092 a instancias de los vecinos, era bastante con que deceleraran para que los policías locales, impotentes, tuvieran que marcharse sin poder hacer nada.
Pero el viernes, todo había cambiado: esa misma tarde, inadvertidamente para los participantes en estas quedadas, se habían instalado señales verticales en los accesos del polígono, indicando que estaba prohibido circular los fines de semana.
La noche del viernes era cálida y seca, así que el polígono comenzó a llenarse de coches. Los vecinos de Novo Mesoiro, empezaron a llamar para advertir a las autoridades, pero los policías locales no hicieron nada, de momento. Querían esperar a que acudieran más participantes, que el polígono estuviera lleno, para dar un merecido escarmiento. Mientras tanto, los coches aceleraban sin parar y derrapaban en las rotondas.
Fue entonces, alrededor de las once, cuando tuvo lugar el accidente. Aquello estaba lleno de espectadores que grababan las pasadas a toda velocidad, así que quedó registrado en un vídeo cómo uno de los conductores que participaban en las carreras perdió el control y volcó su vehículo al tomar una rotonda. Dio varias vueltas de campana antes de detenerse, pero salió ileso del coche destrozado.
Poco después, hicieron acto de presencia los agentes municipales. Varias patrullas se quedaron apostadas en las salidas mientras los agentes grababan todo lo ocurrido y levantaban atestado. Quizá los participantes esperaban que todo acabara en agua de borrajas, pero no fue así: los coches desfilaron uno por uno para ser sancionados. Hasta pasada la medianoche no finalizó la operación policial.
Se enteraron así que, desde las ocho de la tarde del viernes, hasta el lunes a las siete de la mañana, no se permite la circulación en Vío a vehículos no autorizados.