Después de años en busca de una solución, los vecinos de O Martinete consiguieron en la mañana de ayer poner remedio a una situación que ponía en peligro su seguridad. Se trata de la retirada de un gran silo abandonado desde hace más de quince años, el cual suponía un grave riesgo para los vecinos.
“Es algo que llevábamos mucho tiempo reclamando a la Administración. Era necesario que lo retirasen, pero nuestra petición nunca fue atendida y al final lo tuvimos que retirar por nuestros propios medios”, explica Amanda Diéguez, que forma parte de la asociación vecinal Monte Martelo. Es una asociación recientemente oficializada y que trabaja en varios frentes.
“En vista de que nadie hacía nada y de que el silo seguía ahí, lo que hicimos fue ponernos en contacto con la empresa a la que pertenecía. Pero como no era una empresa de aquí, nos dijeron que no iban a venir a retirarlo. Eso sí, nos autorizaron a que lo pudiésemos hacer nosotros, dado que ya no les interesaba”, explica Diéguez.
Así, los propios vecinos fueron los encargados de ponerse en contacto con profesionales que procedieron ayer por la mañana a la retirada del silo, aunque la preocupación continúa. “La zona en la que estaba el silo está entre dos edificios deshabitados, y nos preocupa la presencia de okupas. Ya hay toxicómanos en uno. Y el otro estaba tapiado, pero nos preocupa que también acaben entrando”, afirma al respecto Diéguez.
De hecho, la asociación ecologista Arco Iris ya ha reclamado su derribo. Denuncian también su estado “de insalubridad” y la presencia en la zona de ratas de gran tamaño.