Una parte de la historia comercial de Os Mallos se despide hoy. Al igual que ocurrió el año pasado con el cierre de los cines Yelmo en Los Rosales, el videoclub más antiguo de la ciudad ya se echaba de menos desde que anunciaron, hace semanas, “que hemos llegado hasta aquí”.
Atlántico Vídeo habría cumplido en 2025 cuarenta años de vida. En 1985 lo fundaron Ángel García y Marina Castro –el primero ya está jubilado y la segunda lo hará hoy–, pero su hijo Rubén también es una de las caras visibles de este videoclub de la calle de Francisco Catoira.
Con la llegada de las plataformas de streaming este tipo de negocios comenzó a sufrir. “No es ni mucho menos un negocio para echar cohetes pero cubríamos gastos perfectamente”, señala Ángel García.
El problema, más que el streaming, es “la reducción de títulos que ha habido desde la pandemia. Si antes nos llegaban 30 o 40 estrenos al mes, ahora en abril fueron quince”, añade.
Cuarenta años dan para mucho, pero hay un clásico que rompió todos los récords: ‘Titanic’. “Fue apoteósico, se alquilaban muchísimas películas, lo recuerdo como algo impresionante”, indica.
Hoy Atlántico Vídeo echará el cierre y dejará huérfanos a los más cinéfilos de Os Mallos. “Nos da pena, claro, sobre todo por la clientela fiel que venía todas las semanas. Estos días están viniendo a despedirse y por eso abriremos hoy dos horas por la mañana”, sostiene García, cuyo negocio se suma ahora al Olimpo de la nostalgia.