El alcalde de Abegondo, José Antonio Santiso, afirma que la conciliación familiar y laboral es completa y total en todas las etapas educativas desde los tres años. Y lo es, según él, porque se conjuga la existencia de una escuela infantil y de un aula lúdica, ambas ubicadas en la parroquia de San Tirso de Mabegondo.
Además, indica que este servicio combinado “é dos mellor valorados polas persoas que veñen a vivir ao noso municipio porque ofrece unha opción integral de atención aos cativos”.
Las manifestaciones del regidor tienen lugar coincidiendo con la licitación del servicio de la guardería Pasiños por la que el Ayuntamiento se muestra dispuesto a abonar un total de 240.000 euros al año. El centro tiene una capacidad total de 61 niños de cero a tres años de edad. En concreto, cuenta con cuatro aulas: una de ocho plazas de cero a un años; otra de trece plazas para los de uno a dos años; y dos de veinte plazas cada una para los de dos a tres años. No obstante, se pueden agrupar en función de la demanda.
El servicio tiene como misión ofrecer al pequeño un desarrollo integral de carácter social y educativo en todas sus manifestaciones. Se trabaja la motricidad, control corporal, primeras manifestaciones de lenguaje y pautas de convivencia, entre otros. La adjudicataria asume también la opción de alimentación y el mantenimiento y conservación del centro.
La escuela funciona del 1 de septiembre al 31 de julio, de lunes a viernes, excepto festivos y determinadas fechas especiales. El equipo técnico está compuesto por educadores en educación infantil. Para la adjudicación se valoran mejoras, como la compra de material didáctico, salidas educativas, actividades extraescolares y un asesoramiento nutricional a las familias.
Cabe indicar que el Ayuntamiento destinó una partida de 55.000 euros para apoyar a los estudiantes de todas las etapas educativas. Del total, 30.000 se destinaron a ayudas para transporte con fines educativos y 25.000 a escolarización.
En infantil, primaria y secundaria, se orientan hacia el acceso a la educación, permitiendo la compra de material escolar. En el caso de bachillerato, universidad, ciclos formativos y otras enseñanzas medias no obligatorias, los fondos se destinan a cubrir los gastos de desplazamiento.
Santiso pone en valor estas ayudas, a las que califica como “fundamentales para apoyar a las familias a cubrir costes de transporte y escolarización”.