Los municipios del área metropolitana coruñesa sumaron en un año un total de 70.887 afiliados a la Seguridad Social, 1.424 más, según los datos publicados ayer por el Instituto Galego de Estatística (IGE). Entre el noviembre de 2022 y el mismo mes de 2023 las localidades lograron incrementar un 2% sus personas en alta laboral.
De los ocho ayuntamientos que componen la comarca herculina –sin contar la ciudad–, Oleiros es el que registró un mayor volumen de trabajadores, 15.607 en total en el penúltimo mes de 2023, de los cuales 3.153 son autónomos. Le sigue Arteixo, con 15.395 afiliados – 2.264 autónomos–, y Culleredo con 13.896 – 2.039 autónomos–.
Cambre se apuntó 11.269 afiliaciones a la Seguridad Social, Sada 6.625 y Bergondo 2.677 , mientras que Carral y Abegondo quedan en el final de la clasificación con 3.066 y 2.352 personas en alta laboral, respectivamente. La suma total de autónomos en estos ayuntamientos es de 4.790.
Por sectores, existen 114 vecinos del área metropolitana en el régimen especial agrario –Arteixo es el que contabiliza un número más alto, 28 personas–, 315 en el régimen especial del mar –Oleiros, Arteixo y Sada, con 81 el primero y 72 los otros, están a la cabeza– y 1.935 en el régimen de empleados del hogar. En este último caso, Culleredo y Oleiros cuentan con más afiliados de este tipo, 417 y 401 personas.
En la comarca betanceira hay 15.885 afiliados a la Seguridad Social, 272 más en un año –de noviembre de 2022 a noviembre de 2023–, de los cuales 3.606 son autónomos, 359 empleados del hogar, 136 trabajadores en régimen agrario, 54 en régimen del mar y el resto en régimen general y minería del carbón.
Concretamente, el municipio de Betanzos es el que cuenta con más afiliaciones en alta laboral, 5.426 personas, seguido de Miño, con 2.798, y Curtis, con 1.776. En el polo opuesto están Vilasantar, con 470; Vilarmaior, con 495; e Irixoa, con 505.
Por otra parte, las comarcas de A Coruña y Betanzos contabilizaron el año pasado 302 nuevas empresas, según los datos de explotación del Boletín Oficial del Registro Mercantil (Borme). Una cifra ligeramente superior a la del año anterior y que da muestra de estabilidad industrial en los municipios, con Oleiros como punta de lanza, y sorpresas como Miño, que registró un crecimiento de actividad emprendedora del 166% con respecto a 2022.