En unos días se cumplirán ochenta y ocho años de la inauguración de A Senra. El domingo 12 de julio de 1936 cientos de vecinos asistían a la apertura del centro, sufragado por la emigración en Estados Unidos. Según una escritura de 23 de septiembre de 1928, las instalaciones habían costado 85.000 pesetas (el suelo, 15.000, y la construcción, 70.000).
El sueño, sin embargo, se había iniciado más de un decenio antes con el nacimiento de la Sociedad de Instrucción y Recreo de Bergondo y sus Contornos en Nueva York. De su constitución en 1924 hace un siglo, pero su anhelo se mantuvo vivo a pesar de las contiendas y del Atlántico. Un sueño compartido por muchos, que supieron trasnmitirlo a sus descendientes aquí y allá, y que no se culminó hasta este sábado cuando, coincidiendo con el centenario de la institución, abriendo el área de ocio de A Senra.
Allí, en representación de los ‘americanos’, estuvo Antonio González, uno de los integrantes de la comisión que, a instancias de Isidro Carregal desde Estados Unidos, se dirigen al Gobierno Civil en A Coruña en 1969 para solicitar la devolución de A Senra, incautada oficialmente por causas “nunca notificadas” ni a Nueva York ni a Bergondo.
La respuesta la entendieron como un agravio y, en agosto de 1970, el presidente de la sociedad, Benito Santos, dirigió una misiva d a distintos medios españoles desde Nueva York para denunciar, con un tono reivindicativo pero también desgarrador, la contestación dada por Franco. Comenzó entonces la recuperación de A Senra que, en 2007, tras más de seis decenios de oscuridad y tres de insistencia, a los que se sumaron los casi ochenta meses que se necesitaron para completar su reconstrucción, volvió a abrirse para sus vecinos como espacio de actividad cultural, social y educativa, como colofón a una odisea con la que se consumó la Transición en Bergondo.
En 2022, el municipio encaró una segunda intervención para convertir el entorno en centro deportivo y de ocio, con una inversión de 737.000 euros que permite incrementar la oferta de equipamientos que hasta ahora ofrecía, como área de esparcimiento para la ciudadanía y como instalación complementaria para el CPI Cruz do Sar.
Además, y de ahí la emoción de Antonio González, acompañado por la alcaldesa, Alejandra Pérez Máquez y el presidente provincial, Valentín González Formoso, con esta actuación, incluida en el Plan Único Complementario de la Diputación de A Coruña, se completaron los compromisos asumidos para la cesión de estos terrenos por parte de la Dirección de Patrimonio del Estado, aprobada en sesión de 11 de noviembre de 1999 tras el acuerdo previo con la Sociedad de Bergondo y sus Contornos. Un entorno único por sus servicios pero, sobre todo, por su historia, la del ‘sueño americano’ de A Senra, con la intención de que “continúe sendo espazo de unión e solidaridade” .