En Gosende, una pequeña localidad de Tabeaio (Carral) se han tomado en serio la decoración navideña y han convertido sus casas en un auténtico espectáculo de luces, color y artesanía. Alrededor de una docena de casas muestran desde hace unos días un deslumbrante aspecto, con renos, guirnaldas, papanoeles, árboles y hasta unas casas navideñas en miniatura.
“Levamos tres anos adornando as casas e facemos incluso un acendido todos xuntos, no que rematamos picando algo nalgunha das casas. Sirve para facer piña entre veciños e cada ano participa máis xente”, explica Elisa Suárez, de la floristería Militroques, donde además de las luces llaman la atención nueve grandes renos blancos y brillantes.
La implicación es máxima y los residentes reconocen que ya han recibido visitas para conocer esta pequeña población de Carral cuyo alumbrado no envidia a cualquier plaza mayor. “A raíz de esto creamos hace un tiempo un grupo de Whatsapp donde también organizamos para San Juan o para adornar las casas en Halloween”, cuentan los vecinos, que destacan el “buen rollo” que generan estas iniciativas.
Son el claro ejemplo de la revalorización del rural: “Es muy bonito ver las caras de los niños con las luces. Hay vecinos que antes no ponían nada en sus fachadas y que con todo este despliegue se van animando y ya tienen algunas. Seremos unas 12 casas con decoración y este año el día del encendido, que hacemos casa por casa dando un paseo por la aldea, hubo unas 60 personas”.
Desde Gosende animan a todo el mundo a conocer su poblado navideño, donde no faltan cascanueces ni bastones de caramelo.