El líder del Partido Popular (PP), Alberto Núñez Feijóo, defendió ayer la autonomía del partido para nombrar a sus dirigentes frente a las críticas por la vuelta a la primera fila de Cayetana Álvarez de Toledo y Rafael Hernando y dijo que en “insultos” el Gobierno “ganará siempre”.
A preguntas de los periodistas, Feijóo consideró normal que haya personas a las que les gusten más o menos los portavoces, pero subrayó que el PP marca su agenda. “Dentro de nuestra autonomía, no creo yo que debamos de comparar la escala de descalificaciones entre el Gobierno y la oposición, porque le aseguro que el Gobierno nos va a ganar siempre”, afirmó. Además, aseguró no ser partidario de esa forma de actuar y se comprometió a tratar de no entrar en la “provocación permanente” del Gobierno.
Según el líder del PP, desde que llegó a la presidencia de su partido los ministros “se dedican todos los días” a “insultar” al jefe la oposición, algo que “tampoco lo habíamos visto en la democracia española”.
Feijóo aseguro este miércoles, tras la reunión del Comité Ejecutivo del PP que ratificó los cambios en la dirección y las portavocías parlamentarias, que hará una oposición “proporcional y proporcionada” frente al Gobierno “radical” de España y que no aceptará tutelas ni del Ejecutivo de ningún otro partido, en alusión a Vox, al que no mencionó. Álvarez de Toledo y Hernando, exportavoces populares en el Congreso, fueron designados portavoces adjuntos en la Cámara Baja.
Por su parte, el portavoz del PP en el Congreso, Miguel Tellado, defendió ayer la remodelación de su grupo parlamentario al afirmar que cuenta con el “equipo titular” para afrontar una legislatura que “algunos quieren que sea bronca”, pero aseguró que los populares no van a propiciarlo.
Tellado, que se estrenó ayer como portavoz del grupo popular coincidiendo con la jornada de puertas abiertas con motivo de la próxima celebración del Día de la Constitución, recalcó que “ésta no va a ser una legislatura más”.
El diputado, que defendió la presencia en él de Álvarez de Toledo y de Hernando en el equipo, subrayó que aunaron experiencia y renovación para formar un equipo preparado para afrontar las dificultades que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha “querido plantear a nuestra democracia”.
En este sentido, señaló que el reto del PP no es solo representar a sus ocho millones de votantes, sino a los once millones que electores que votaron cambio, una mayoría constitucionalista que “no acepta lo que pretende hacer Pedro Sánchez en nuestro país”, recalcó.
Así, se centrarán en defender la Constitución, el Estado de derecho, la separación de poderes, la independencia del poder judicial y la igualdad entre españoles ante la ley.
Unos principios “esenciales y sagrados” que, en su opinión, han sido “atacados” por el Gobierno en sus primeros pasos al haber sido utilizados de “moneda de cambio” para que Sánchez continúe en la Moncloa legislando “en favor de los que han delinquido”.