La Policía continúa investigando el incendio del edificio de Vigo en el que murieron cuatro miembros de una misma familia el pasado miércoles y "todas las hipótesis están abiertas".

Los cuatro fallecidos fueron enterrados esta mañana en el cementerio de Feáns, en A Coruña, en donde Sinaí Giménez, portavoz de los gitanos en Galicia, habló con los medios de comunicación, a los que agradeció su presencia en el entierro, así como la cobertura de la noticia del incendio. "Como habéis visto, ha sido una convocatoria multitundiaria, a pesar del día malísimo que hacía hoy", afirmó.

"No queremos nada, solo justicia -añadió- , una investigación seria, que no escatimen medios y si alguien ha cometido estos delitos que los envíen a prisión que ya nuestros abogados van a pedir cadena perpetua revisable para los supuestos asesinos".

Giménez explico que "son momentos muy duros y muy difíciles porque se ha llevado a toda una familia, inocente, que estaba en su casa con sus niñitos y es una situación muy desagradable esta que estamos viviendo y aún hay gente en los hospitales".

Investigación

Fuentes de la Policía Nacional han explicado este viernes que siguen las gestiones para esclarecer los hechos y por ahora no hay conclusiones del informe de la Policía Científica, que "tardará unos días".

Al mismo tiempo, el grupo de investigación continúa tomando declaraciones y realizando gestiones y, "por el momento", mantienen "todas las hipótesis abiertas", por lo que está por ver si fue accidental o intencionado, como sospechan los vecinos del inmueble.

El principal foco del incendio estuvo en el portal número 6 de la calle Alfonso X, en el centro de Vigo, un inmueble que estaba okupado prácticamente en su totalidad.

Como consecuencia de la inhalación del humo, perdieron la vida cuatro personas, todas de la misma familia: una madre y tres de sus cuatro hijos -dos niñas y un niño-. El padre y otra hija fueron rescatados por los bomberos y están ingresados en hospitales de Vigo y A Coruña, respectivamente.

En total, nueve personas resultaron heridas -entre ellas un bombero-, de las que tres fueron dadas de alta horas después del incendio y seis siguen hospitalizados, entre ellas el padre y su hija de 8 años.