El mes de junio abre en Santiago un novedoso formato de “take away” que acerca el auténtico sabor de la aldea a todos los públicos. 

El Chichalovers, un pequeño establecimiento ubicado en la Puerta del Camino, especializado en chorizos y chicharrones (de elaboración propia), que recupera los sabores más tradicionales de la aldea con un formato desenfadado, moderno y divertido para degustar, con las manos, en cualquier punto de la ciudad. 

Bocados que te transportarán a los domingos de cocido en la casa de tu abuela, a los chorizos asados en el lar de la casa de la aldea, y la otros sabores que mezclan vanguardia y tradición teniendo como base los famosos rixóns y chorizos de A dos Capelo (ganadería familiar de una de las partes asociadas). 

Graciela Castro de ONyVÁ eventos, una conocida marca de eventos gastronómicos junto con su socio, Darío Capelo, propietario de la carnicería A dos Capelo (localizada en la Nave 1 del comprado de Abastos de Santiago), juntaron sus respectivos legados familiares procedentes del sector ganadero y el sector gastronómico, para crear este maravilloso proyecto con el fin de por en valor el territorio y el producto de proximidad de una forma innovadora. 

El establecimiento, que abrirá sus puertas la primera semana de junio, tiene como fin, recuperar esos sabores más tradicionales, para acercarlos la un público más amplio, desde los más nuevos hasta los mayores. “Queremos seguir perpetuando a nosa cultura a través da gastronomía, transmitir que os produtos máis tradicionais poden ser atemporales e adaptarse as novas tendencias sen perder a súa esencia”, expresa Graciela Castro, co-fundadora de este proyecto. 

“Cajoendiola”, “Quedar coma un Pepe”, “Trapalleiro” ou “Arredemo”, son algunos de los bocatas que podrás encontrar en la carta del Chichalovers. Las expresiones más míticas de nuestros antecesores para bautizar los bocadillos que te llevarán de vuelta tu infancia y que, Graciela y Darío, recogen en un glosario traducido la otras lenguas para que  nuestra cultura cruce fronteras. 

Además de un viaje en el tiempo, el Chichamaps, un mapiña con las localizaciones  más chulas de los aledaños, te llevará a disfrutar de un picnic con sabor de la aldea en algunos de los lugares mágicos de la ciudad.