La rúa Fornos, ubicada entre las parroquias oleirenses de Maianca y Serantes, es la otra calle que avergüenza al alcalde, Ángel García Seoane, por el estado que presenta. La primera que sacaba los colores al regidor es la calle Helios, en Icaria, en Montrove. Seoane, que afirma que en breve se reparará la vía, explica que el deterioro se debe al tráfico pesado generado por la construcción de viviendas en la zona.