Alejandro Quinto es un reconocido cirujano plástico especializado en cirugía estética y reparadora. Su pasión por la cirugía comenzó desde su etapa en el instituto, y fue durante su tiempo en la universidad cuando descubrió que la cirugía plástica era la especialidad que reunía todo lo que le apasionaba: la reconstrucción, la atención al detalle y la búsqueda de armonía en el cuerpo humano.
A lo largo de su carrera, el Dr. Quinto ha sido testigo de la evolución constante de esta disciplina, tanto en el ámbito reconstructivo como estético, adaptándose a los avances tecnológicos y a las nuevas demandas de los pacientes. A lo largo de esta entrevista, nos comparte su experiencia, los desafíos que ha enfrentado y cómo la cirugía plástica sigue siendo una fuente constante de aprendizaje y motivación para él.
1. ¿Cómo ha evolucionado la cirugía plástica desde que comenzó su carrera?
En el mundo reconstructivo, la tecnología nos permite intervenciones cada vez más complejas, con resultados más satisfactorios, permitiendo a los pacientes recuperar forma y función de zonas del cuerpo perdidas, por ejemplo, por traumatismos o tumores.
Respecto a la cirugía estética, la evolución está siendo hacia técnicas menos invasivas y más delicadas. Además, el concepto de anti-aging ha sido sustituido por well-aging: acompañar a los cambios naturales de las diferentes etapas de la vida para vernos mejor, sin buscar retroceder en el tiempo, con procedimientos menos agresivos.
Es un área que nunca deja de evolucionar, lo que me resulta muy estimulante porque siempre hay algo nuevo que aprender o descubrir en congresos, cursos o simplemente hablando con compañeros de diferentes partes del mundo.
2. ¿Cuáles han sido los mayores desafíos en su trayectoria profesional?
Si hablamos de lo académico podría destacar el acceso a las especialidades médicas, ya que es muy exigente. Requiere al menos seis años de universidad, el examen MIR y cinco años de especialidad.
Desde el punto de vista del especialista, estar en una profesión en constante evolución te exige formarte de forma continua y estar siempre actualizado para poder ofrecer los máximos estándares en cada momento.
3. ¿Cómo ha cambiado la percepción de la medicina estética en los últimos años? ¿Cuáles son los tratamientos más solicitados?
Hace años existía una tendencia a la exageración, rostros más tensionados y rellenos, que podían dar sensación de estar hinchados. Sin embargo, hoy en día tanto médicos como pacientes buscamos resultados sutiles y naturales, realizando procedimientos con los que te ves mejor, pero que luego a la gente de tu alrededor les cueste descifrar si te has realizado algún tratamiento.
Desde hace años, la medicina estética está mucho más democratizada y ya no únicamente con el objetivo de combatir el envejecimiento, sino para acompañar y potenciar la belleza desde la juventud, con un objetivo también preventivo, antes de que ciertos cambios se produzcan. Tampoco es algo exclusivo de mujeres, aunque siguen siendo el perfil de paciente más habitual, siendo cada vez más los hombres que cuidan esta parte de la estética.
En todo el mundo, lo más solicitado, tanto en mujeres como en hombres, es la toxina botulínica para eliminar arrugas, seguido del ácido hialurónico para reposicionar volúmenes perdidos con el paso de los años, o armonizar o hidratar ciertas zonas.
4. Para aquellas personas que buscan rejuvenecimiento sin cirugía, ¿qué procedimientos recomienda?
El primer paso hacia el rejuvenecimiento, antes de los procedimientos, es no fumar y usar factor de protección solar, siendo estos dos de los factores que más nos envejecen y están presentes en nuestro día a día.
Si hablamos de procedimientos sin recurrir a cirugía, la toxina botulínica es la más popular y la que más nos puede ayudar a combatir los primeros signos de envejecimiento. El siguiente en la lista sería el ácido hialurónico, que permite hidratar, dar armonía y firmeza al rostro y, con el paso de los años, reposicionar los volúmenes perdidos.
5. En su experiencia, ¿cuál es el error más común que cometen los pacientes al elegir un tratamiento estético?
Los principales errores que suelo señalar son no acudir a un profesional cualificado para recibir asesoramiento, ignorar las recomendaciones previas al procedimiento y no seguir los cuidados necesarios después del mismo. Hoy en día, es fácil caer y dejarse llevar por lo que vemos en redes sociales: tratamientos low-cost, filtros, descuentos comerciales… Pero no hay que dejar de ver la medicina estética como lo que realmente es, un tratamiento médico que requiere indicación por un profesional.
6. En un mundo donde las redes sociales y los filtros influyen en la percepción de la belleza, ¿cómo manejas las expectativas poco realistas de algunos pacientes?
Me gusta explorar las motivaciones del paciente que llega a consulta para entender mejor cuál es su preocupación y qué le gustaría mejorar y, con ello, explicar qué podemos conseguir con cada tratamiento. Si esas dos cuestiones están en consonancia, podremos lograr un resultado satisfactorio.
Para entender mejor sus expectativas, me gusta animarles a que me enseñen fotografías de resultados que les gustan y hacerles saber que muchas veces están modificadas con filtros. De hecho, ahora mismo es habitual que lleguen pacientes -sobre todo del segmento más joven- con imágenes generadas con IA sin ser conscientes de ello, pensando que esa imagen creada de forma artificial puede ser una realidad. En el futuro tendremos que tener cuidado con la IA para que no sea un catalizador de complejos basándose en imágenes no realistas.
7. En cuanto a la cirugía de mama, ¿cuál es el procedimiento más demandado y por qué?
El aumento de pecho siempre ha sido el más demandado, seguido por la elevación de pecho. Ambas intervenciones en muchas ocasiones se realizan combinadas en situación de postmaternidad.
8. La cirugía de confirmación de género es un campo muy especializado. ¿Cómo ha sido su experiencia trabajando en este ámbito?
Es de las cirugías más satisfactorias para mí, puedes cambiarle la vida a alguien formando parte de su proceso. En la mayor parte de los casos, los pacientes con disforia de género sienten una gran liberación tras la cirugía, iniciando una nueva etapa en la que se sienten más ellos mismos que nunca, y es muy especial para mí formar parte de ese camino.
9. ¿Qué factores consideras que son clave para obtener los mejores resultados en una liposucción o abdominoplastia?
La liposucción es de los procedimientos que más ha evolucionado en los últimos años, con un refinamiento extraordinario de la técnica, la aparición de tecnologías que ayudan a potenciar los resultados y con un foco especial en la seguridad.
Desde el punto de vista del cirujano, una buena planificación y gestión de expectativas es importante dadas las percepciones erróneas que podemos tener de resultados vistos en televisión o redes sociales. Desde el punto de vista del paciente, es una cirugía en la que el postoperatorio es fundamental, mantener un estilo de vida saludable es clave si queremos mantener los resultados en el tiempo.
10. ¿Cuáles son los principales avances tecnológicos que han mejorado la cirugía plástica en los últimos años?
La impresión 3D y la planificación digital permiten crear prótesis y material quirúrgico personalizado a cada paciente y planificar intervenciones con mayor precisión, muy útil en cirugía reconstructiva. En el caso de quemaduras, el desbridamiento enzimático, antes solo posible con cirugía, ha cambiado completamente el pronóstico de pacientes con quemaduras graves.
Han aparecido nuevas tecnologías como radiofrecuencias, láseres o ultrasonidos que permiten complementar procedimientos que ya realizábamos, optimizando sus resultados o permitiendo tiempos de recuperación más cortos.
Cada vez está más a la orden del día el uso de medicina regenerativa en forma de plasma rico en plaquetas o células madre para mejorar la cicatrización y potenciar los resultados.
11. ¿Qué consejo le darías a alguien que está considerando someterse a una cirugía plástica por primera vez?
Estar en manos de un profesional titulado es fundamental. Después, igual que en otras cirugías, no fumar las semanas pre y post procedimiento es importante para reducir los efectos del tabaco en la cicatrización.
El miedo a lo desconocido suele ser el principal factor que genera nervios antes de una primera cirugía. Seguir las indicaciones del cirujano y no quedarse nunca con dudas antes de entrar al quirófano te ayudará a mitigarlos. Para ello, el cirujano es la figura que debe despejar todas tus dudas, ya que en internet puede ser realmente complicado distinguir la información de la desinformación.
12. ¿Hay alguna cirugía o caso en particular que haya marcado tu carrera de manera especial?
Hay dos tipos de cirugías que me marcan especialmente.
Las cirugías de confirmación de género son especialmente gratificantes porque juegas un papel clave en la transición de una persona. Desde el día de la cirugía hasta cada revisión, ves cómo crece su seguridad y bienestar.
Por otro lado, están los pacientes quemados o con infecciones graves, que a veces amenazan la vida. Participas y los acompañas durante meses, viendo su reconstrucción tanto física como emocional. Muchos de ellos, incluso después del alta, siguen visitándonos cada año para saludarnos, agradecer y felicitar las fiestas. Es un recordatorio de lo importante que es esa parte de la profesión.
13. Si pudieras dar un solo consejo a quienes buscan mejorar su apariencia mediante cirugía o medicina estética, ¿cuál sería?
Consultar a un profesional titulado.
14. ¿Qué avances te gustaría ver en el campo de la cirugía plástica en los próximos años?
Si bien la inteligencia artificial y la robótica ya son casi una realidad en diferentes áreas de la medicina (aunque la inteligencia artificial aún está comenzando a consolidarse), la bioingeniería podría permitir la creación y regeneración de tejidos. Imaginemos 'imprimir' piel artificial u otros tejidos a partir de las células de un paciente, lo que permitiría realizar una reconstrucción sin necesidad de recurrir a 'zonas donantes'.
En cuanto a las técnicas, me encantaría ver un progreso en esta línea, desarrollando procedimientos cada vez menos invasivos, más seguros y con tiempos de recuperación más cortos.