El Ministerio de Educación, Formación Profesional y Deportes ha destacado el “buen clima” de la reunión celebrada ayer entre de la ministra, Pilar Alegría, y los representantes de las comunidades para avanzar en la regularización del uso de los dispositivos móviles en los centros educativos.
En el encuentro se debatió sobre la necesidad de dar “una respuesta común a una preocupación social como es el uso de estos dispositivos tecnológicos en los colegios”, según informó el Ministerio.
No obstante, las autonomías gobernadas por el Partido Popular criticaron tras la reunión que la propuesta del departamento que dirige Alegría para prohibir los teléfonos móviles en los colegios de toda España “llega tarde” ya que esta medida se encuentra ya implantada en varias regiones del país, entre ellas Galicia desde el 8 de enero.
Asimismo, rechazaron que la ministra de Educación haya presentado esta propuesta para establecer una limitación de estos dispositivos en las aulas, común para toda España, en una reunión de carácter “informal” en vez de convocar una Conferencia Sectorial.
La reunión, según aseguró Educación, “se ha desarrollado en buen clima y ha puesto de manifiesto la preocupación compartida por el Ministerio y las comunidades autónomas sobre este aspecto”.
Siete territorios –incluidos Ceuta y Melilla–, han puesto en marcha ya su propia regulación en lo relativo a esta materia, mientras que el resto están en proceso de debate con sus consejos escolares y la comunidad educativa. Otros cuatro contaban ya con algún tipo de regulación.
La ministra Pilar Alegría explicó a los representantes de las comunidades la propuesta del Ministerio y subrayó la importancia de “hacer frente a esta preocupación e inquietud social de manera coordinada”.
“Se trata de contar con una postura común, escuchándonos los unos a los otros, que permita un consenso de mínimos para que luego las comunidades, dentro de su autonomía, puedan realizar sus recomendaciones o instrucciones en un asunto de gran importancia para la sociedad”, señaló.
La propuesta trasladada por el Ministerio a las comunidades consiste en un uso cero del móvil en los niveles de Educación Infantil y Primaria, y en limitarlo a actividades pedagógicas cuando el docente así lo considere en Educación Secundaria, Bachillerato y Formación Profesional. En todos los casos recogidos se contemplarán circunstancias excepcionales.
Además, hay comunidades que plantearon que en etapas de enseñanzas postobligatorias sean los centros los que puedan establecer el uso.
Educación destacó que esta reunión sirvió “para comprobar el interés común de la comunidad educativa en dar una respuesta a esta inquietud y evidenció que las respuestas que se están dando y en las que se están trabajando van en una línea muy similar a lo planteado por el Consejo Escolar y el Ministerio”.