El Gobierno aprobó ayer la segunda edición del Bono Cultural Joven por el que los jóvenes que cumplan 18 años este 2023 podrán disfrutar de 400 euros para destinar a diferentes actividades o productos culturales, desde arte hasta libros, música, cine o espectáculos taurinos, y se entregará a todos los jóvenes de 18 años que lo soliciten independientemente de la renta familiar.
“Es un bono que va dirigido a todos los jóvenes, es el recibimiento a la mayoría de edad y su vinculación con la cultura, para la construcción de una sociedad más crítica y comprometida. Entiendo que habrá personas que igual no lo precisen y puede que no lo soliciten pero, sin duda, son muchas familias españolas donde el acceso a la cultura y poder dedicar sus hijos esta cuantía tan importante, es bien recibida y valorada”, explicó la ministra de Política Territorial y portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez.
Así se pronunció ayer al ser preguntada por si el Gobierno se plantea distinguir por renta para conceder este bono, al igual que anunció que va a hacer con el bono social térmico, para que lo reciban solo quienes lo necesitan. Rodríguez insistió en que este bono está dirigido a “todos los jóvenes” porque “lo que se persigue es que se acerquen a la mayoría de edad con una alternativa de ocio distinta y acompañen a una industria cada vez más pujante en el país, como es la industria cultural”.
Al igual que en la edición anterior, estas ayudas de 400 euros van dirigidas a 500.000 jóvenes que cumplan los 18 años a lo largo de 2023, y podrán destinarlo a la adquisición y disfrute de distintos productos, servicios y actividades culturales. En concreto, la ministra y portavoz precisó que podrán destinar hasta 200 euros a “artes, espectáculos en vivo, patrimonio cultural y artes audiovisuales como entradas para música en directo, artes escénicas, cine, museo, bibliotecas o espectáculos taurinos”.
Además, podrán dedicar un máximo de 100 euros a bienes culturales en soporte físico, como “libros, revistas, prensa u otras publicaciones periódicas, también a videojuegos, partituras musicales o discos”; y otros 100 euros al consumo digital o en línea, es decir, a la suscripción en plataformas musicales, audiolibros, podcasts, suscripciones digitales a publicaciones periódicas –limitadas a un máximo de cuatro meses–.
No será subvencionable la adquisición de productos de artesanía, obra plástica y gráfica, productos de papelería, libros de texto curriculares, cursos, talleres y seminarios, equipos de software, hardware y consumibles de informática y electrónica, instrumentos musicales ni espectáculos deportivos, de moda y gastronomía.
Asimismo, no será subvencionable la adquisición de productos calificados como pornográficos.
Tal y como indicó Rodríguez, del total de la edición del año pasado se adhirieron ya a esta iniciativa 3.000 establecimientos en España.
La futura norma también prevé que el Bono Cultural Joven sea compatible con cualquier otra subvención, ayuda, ingreso o recurso procedente de otras administraciones públicas.