La ministra de Igualdad, Irene Montero, volvió a defender en el Congreso su Ley de Garantía de la Libertad Sexual, conocida como ley solo sí es sí, y reconoció que, recogiendo un “cambio profundo” en el Código Penal, es normal que haya “dificultades y problemas en su aplicación”.
“Efectivamente, con un cambio tan profundo en el Código Penal puede necesitarse tiempo para asentarse y también puede generar dificultades y problemas en su aplicación”, aseguró.
Sin embargo, la ministra insistió en que la ley es “sólida” y que “protege a todas las víctimas” de violencias sexuales. Según indicó, tanto en esta norma, como en la ley trans, su departamento cumplió “escrupulosamente” con la Ley de Gobierno e indicó que saldrán adelante porque, “pese al voto en contra” del PP, en el Congreso hay “más feministas que quieren que los derechos de las mujeres y de las personas trans se vean garantizados”.
A esa mayoría feminista en la Cámara recurrió también Montero para responder a la portavoz adjunta de Vox en la Cámara Baja, Inés Cañizares, que le cuestionó este miércoles en la sesión de control. En este caso, la diputada le preguntó si, tras los datos de rebaja de penas y excarcelaciones a violadores que dejó la ley del solo sí es sí tiene previsto “acabar la legislatura como ministra”.
Para la responsable de Igualdad, Vox “no tiene un problema” con ella o con su Ministerio, sino con “el movimiento feminista”. “Y por suerte, tanto dentro de esta Cámara como fuera somos más”, señaló. Para Montero, este movimiento “es lo mejor de este país” así como la principal fuerza democratizadora” para “vivir en una sociedad mejor” y para que esta “amplíe oportunidades de felicidad” y “desarrolle sus proyectos de vida”.