Los padres de un alumno del colegio San Francisco Javier denuncian que su hijo de 7 años, diagnosticado con Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad (TDAH), sufre falta de atención y acoso por parte de su tutora desde el comienzo del curso, lo que provoca que el menor tenga “miedo” de regresar a su clase y por ello se encuentra de baja médica desde el pasado día 9.
Sonia N., madre de E. –se utilizarán las iniciales para mantener su intimidad del menor–, explica que han puesto los hechos en conocimiento de la jefatura de estudios del centro escolar y de la Consellería de Educación, pero sin ninguna solución por el momento. Además, han formulado una denuncia ante la Policía Nacional. Los hechos se producen “desde el inicio de este curso”, señala la madre del menor, quien recuerda que en los primeros meses la tutora llegó a “golpearle con un libro en la cabeza”, una situación que trataron con la profesora, quien definió este acto como “toques de atención”.
Los golpes remitieron, aunque el “acoso” y la “falta de atención adaptada” continuaron, explica Sonia. Así, afirma que el centro y la tutora “se niegan a seguir el protocolo del TDAH establecido por la Xunta”, que incluye una serie de pautas especializadas ya que consideran que “no es necesario”.
“El niño fue obligado a estudiar un trimestre con con libros de 1º de Primaria, sin apenas tocar los de su aula, mientras que el examen trimestral tuvo que hacerlo como los demás niños teniendo en blanco sus libros en las principales materias y con el resultado de suspender esas asignaturas”, asegura Sonia.

“Miedo”
Además, denuncia que la profesora le “grita” cosas como “lee como un niño de Primaria o te quedarás con los niños de Infantil” cuando le toca hacer una lectura y también le llamó “tonto, diablo o diablillo”, hechos corroborados por algunos compañeros de clase.
La madre de E. destaca que estas “vejaciones” provocan en el menor “vergüenza, rechazo y miedo”, una situación que les ha llevado a pedir por segunda vez, la primera fue al principio del curso, el cambio de colegio, que ha sido denegado.
Esta situación no se produjo el año pasado, cuando contaba con otra tutora, pero ahora “tiene pánico de volver” a la misma clase por la situación que se produce. 
Por el contrario, afirma que la relación con los compañeros es “estupenda” y que le “apoyan mucho”. Sonia asegura que el año pasado hubo una denuncia de otra madre contra la misma profesora y que la nueva orientadora del centro escolar todavía no conoce a su hijo. l