En la noche del pasado viernes, el Barrio de las Flores volvía a celebrar su aniversario con un programa de festejos donde, cada vez con más peso, destaca la velada amateur organizada por el club Ludus Box (que habitualmente entrena en el polideportivo que esta vez era escenario de los combates), cuyos beneficios iban destinados a CASCO (Comité Antisida de A Coruña).
El primero de los combates fue el que el versátil Cristian Toledano ganó a Yoelbis Medina, uno de los representantes que el Club de La Lucha de Noia desplazó a esta cita. De hecho, en el segundo de los combates sería Francisco Rodiño, otro de sus boxeadores, el que derrotaba al coruñés Daniel Regueira.
La temperatura subió con la irrupción de David ‘La Perla’ Martínez, vecino del Barrio de las Flores que, no sabemos si contagiado por el ambiente, se lanzó al ataque desde un primer momento, lo que aprovechó su rival, el boirense Neo Blanco, para esperarle y lanzar precisas contras. La tenacidad de Martínez tuvo su fruto cuando con un crochet de izquierda derribó a su rival en el segundo asalto, pero el esfuerzo realizado se notó claramente en el tercero y último: Blanco acabó mucho más entero y sentenció la contienda a su favor.
A continuación, la sorpresa de encontrarnos a Óscar Márquez (ágil zurdo que vino de Santiago, aunque es de origen hondureño y gasta ‘look’ a lo Ray Sugar Leonard), que en el último momento sustituía al indispuesto Diego Couceiro para enfrentarse al cordobés David Bachiller. El combate fue muy trabado, con numerosas interrupciones y algún que otro corte por choque de cabezas. Bachiller parecía dominar la distancia larga, y conectó muchos golpes al principio, pero al final falló mucho ante un elusivo Márquez, eficaz en el contragolpe y al que los jueces decretaron vencedor.
Paradójicamente, el duelo que enardeció al público fue entre dos debutantes: David Pujades (notorio miembro de varias asociaciones vecinales de la zona, recibido con pancartas al grito de ‘Presidente, presidente’) y Miguel Ángel González, zurdo de Noia y que empezó siendo el claro dominador. Pujades se repuso y en el tercer asalto, ya con ambos muy cansados, pudo conectar mejor. Los jueces decretaron nulo, resultado que no dejó satisfecho a nadie.
Severo castigo
La noche concluía con Martiño Río enfrentándose al andaluz Ángel ‘El Tanque’ Rodríguez. Río fue netamente superior, con combinaciones más largas y variadas, aprovechando su mayor envergadura para golpear, ballestear hacia atrás esquivando la contra, y volver a atacar de nuevo cuantas veces quiso. No obstante hay que dar mérito al cordobés, que aguantó el chaparrón, gestionó bien su fondo físico, sorprendió en ocasiones a Martiño (‘El Tanque’, al fin y al cabo, guardaba algún obús) y completó los tres asaltos pese al severo castigo. l