El aclamado violonchelista madrileño Pablo Ferrández, de origen gallego, impartirá clases magistrales a jóvenes músicos el próximo 17 de agosto en Vigo. Y lo hará de la mano de su prestigioso e histórico instrumento: un Stradivarius de 1696.
Dentro de esta iniciativa, promovida por la escuela de música y aprendizajes activos Bambera, habrá clases activas, dirigidas a alumnos de grado superior de música, máster y postgrado, para los que hay un total de ocho plazas. Cada uno de ellos trabajará un determinado repertorio con Ferrández, que les explicará, de manera individual, cómo deben trabajar las obras que han seleccionado para sacarles el máximo partido. Para alumnos oyentes hay 32 plazas y, en este caso, no se exige ningún requisito de edad ni de estudios y pueden asistir a todas las clases.
A sus 26 años Pablo Ferrández es considerado por la crítica como uno de los mejores violonchelistas del panorama actual, debido a su técnica y “a una madurez impropia de su edad”. Este músico, que toca uno de los 1.000 Stradivarius que hay en todo el mundo –cedido en este caso por la Fundación Musical Nipona–, fue nombrado Mejor Artista Joven del año 2016 en los International Classical Music Awards, cuyo jurado está integrado por miembros de las revistas sobre música clásica más importantes del mundo. E hizo historia siendo el primer español premiado en el prestigioso XV International Tchaikovsky Competition de Moscú.
Nacido en Madrid en 1991, en una familia de músicos –su padre es de Ferrol–, Pablo Ferrández inició sus estudios musicales a los tres años. A los trece ingresó en la Escuela Superior de Música Reina Sofía, donde se le premió como el estudiante más destacado durante cuatro años consecutivos. El joven continuó su formación en Alemania y ha tocado con las mejores orquestas de Europa, América y Asia.
Ferrández resalta que en su formación musical ha influido “muchísimo” el método “El Mago Diapasón”, creado por su madre, Paqui Castro, músico y profesora de música. Ella le ayudó a desarrollar el oído absoluto, que poseen todos los bebés, mediante este método. El oído absoluto es la capacidad de identificar una nota musical por su nombre o de reproducirla sin haberla escuchado antes. Entre los pocos privilegiados que han tenido esta capacidad están Mozart, Frank Sinatra, Mariah Carey o Michael Jackson.
“El impulso que te da empezar desde tan pequeño y con tantas ventajas como el oído absoluto es de un valor enorme para un músico, hay muchas cosas de las que no tienes que preocuparte más adelante porque ya son completamente automáticas”, indica.