El Ayuntamiento de A Coruña ha encargado la restauración de su reloj en María Pita, que dejó de funcionar a principios de 2020, después de 20 años desde la última reforma de su maquinaria, con el objetivo de que vuelva a sonar en primavera. Fuentes municipales señalan que los trabajos han avanzado tan deprisa que la reparación del reloj no es puntual, sino que sufre un adelanto, así que se puede decir que dará la hora antes de tiempo.
Una empresa coruñesa realiza los trabajos de restauración de la maquinaria, que ha estado funcionando desde principios de siglo tan solo con labores de mantenimiento, informan fuentes municipales, muy distintos de los trabajos que se están llevando a cabo ahora: una verdadera puesta a punto.
Se trata de una tarea de rehabilitación completa y muy compleja debido, precisamente, a la antigüedad de las piezas, según informó el Ayuntamiento, dado que algunas estaban desgastadas y tuvieron que ser sustituidas. El Gobierno local asegura que el reloj es un “símbolo de la ciudad” y por eso ha sido necesario recuperarlo “con las mayores garantías posibles”.
El Obelisco
Tras un siglo funcionando, apunta el Ejecutivo coruñés en un comunicado, la maquinaria comenzó a fallar y el reloj dejó de marcar las horas a principios del año pasado, poco antes del confinamiento por la expansión del coronavirus.
Por otro lado, la rehabilitación de los relojes de la ciudad no se va a detener allí: otros cronógrafos históricos pasarán por el taller. Entre ellos, el más emblemático: el Obelisco.