El vicepresidente primero de la Xunta, Alfonso Rueda, mostró ayer su deseo de que “ojalá que en poco tiempo” se puede ampliar el horario de funcionamiento de toda la hostelería en general, como ha ocurrido ahora con los restaurantes, que pueden dar cenas hasta las once.
En un acto en Ourense, preguntado por los periodistas, contó que la del viernes, primera jornada en la que se permitía, fue una noche “normal”, pero seguramente vaya a más, pues se trata de un ocio impracticable desde hace meses a causa de la pandemia del covid-19.
Es un “paso importante”, subrayó Rueda, en un día en el que se conoció, según los datos facilitados por la Consellería de Sanidad, que son 194 los nuevos contagios habidos en 24 horas, tras superar los dos centenares en el último recuento y durante esa misma franja completa.
“Mucha prudencia” y “sentidiño”, reivindicó Rueda, al recordar que el virus sigue ahí y que la idea es mantenerlo bajo control, a la vez que se apura con la vacunación, y obtener cifras “que nos permitan seguir avanzando”.
Apuntó, además, que todas las medidas adoptadas han sido tratadas con las asociaciones de hosteleros.
Primer día de cenas
Los restaurantes gallegos volvieron a servir cenas con cita previa desde la noche de ayer, que estuvo marcada por la “animación” y la ocupación de la mayor parte de las mesas disponibles y que ha transcurrido con “normalidad”.
El presidente de la Asociación Provincial de Empresarios de Hostelería de Lugo, José Francisco Cheché Real, destacó que en la zona se percibió una “cierta animación” en la primera noche en la que se amplió el horario de los restaurantes y confió en que se registre “más afluencia” el próximo fin de semana.
La policía realiza controles para hacer cumplir la normativa
En Vigo, la Policía Local realizó varios apercibimientos verbales a establecimientos que permanecieron abiertos tras las 21.00 horas debido a que, aunque servían comidas, no disponían de licencia de restaurantes, según informaron fuentes del cuerpo. Por su parte, el conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, indicó que le viernes se celebró una reunión con el Centro de Coordinación Operativa de la Policía (CECOP) y se organizó un dispositivo de control con las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado por las nuevas medidas. “La percepción que tenemos es que funcionó razonablemente bien”, apuntó el conselleiro.
En todo caso, puso el foco en que “a la mesa (de la hostelería) le falta una pata”, que identificó con la necesidad de igualar los horarios máximos de apertura de los distintos establecimientos. Así, remarcó que el sector demandó a la Xunta que también se permitiese ampliar hasta las 23.00 horas el horario de apertura de bares y cafeterías.
Real incidió en la importancia de que se agilice el proceso de vacunación contra el covid-19 para que se reduzcan los contagios y sea posible “acabar con las restricciones”
Por su parte, el presidente de la Federación Provincial de Hostelería de Pontevedra (Feprohos), César Ballesteros, explicó que, aunque algunos establecimientos permanecieron cerrados en la noche de este viernes, hubo una apertura generalizada de la mayor parte de los restaurantes de la ciudad.
Además, Ballesteros indicó que se observaron “dificultades para encontrar huecos” en estos establecimientos de hostelería, que en su mayor parte completaron el aforo máximo permitido.
También apuntó que algunos establecimientos como las taperías no pudieron ampliar su horario de apertura dado que esta medida se ha limitado a los locales con licencia de restaurante.
Precisamente, recordó que la Consellería de Sanidade se había mostrado “muy reacia a la desescalada”, mientras el sector había defendido la necesidad de que se permitiese la apertura de los restaurantes por las noches dado que ya podían ejercer su actividad al mediodía Sin embargo, defendió que los establecimientos hosteleros “prefieren abrir con limitaciones a estar cerrados”.