La Fundación Barrié y el Instituto Tecnológico de Galicia (ITG) presentaban ayer la primera edición de la Liga Maker Drone, una propuesta con la que fomentar el desarrollo de la educación en el campo de la tecnología, con el objetivo de que el campo educativo se adelante a los cambios de paradigma actuales.

Se trata de una propuesta para el alumnado de tercero de la ESO de centros educativos de Galicia. Serán 18 el total de centros que participarán, previa inscripción y selección de institutos, los cuales recibirán formación en materia de robótica y drones para, posteriormente, ser capaces de resolver un reto que propondrá la organización.

Un ejemplo utilizado en las pruebas piloto fue que los alumnos diseñaran e implementaran un sistema de recogida de residuos ligeros (como botellas de plástico). En ese caso, el drone estaba facilitado por la propia organización.

Además de un ganador se premiará también la solución más disruptiva o el
mejor diseño

El plazo para que los centros educativos presenten sus inscripciones ya está abierto y cerrará el 1 de octubre. Previamente, se ofrecerán dos “webinars” informativos sobre esta propuesta y sobre los drones y sus campos de estudio. Entre el 15 y el 20 de octubre se seleccionarán los centros participantes y éstos tendrán que confirmar su participación.

Una semana después, comenzarán las sesiones de introducción a los drones. Desde noviembre a enero habrá varias semanas de formación tecnológica, siendo el 19 de noviembre cuando se presente el reto de la edición. Entre febrero y mayo los equipos prepararán el reto y en mayo lo exhibirán en la ciudad.

Habrá un equipo ganador, que recibirá como premio un kit drone, pero también se galardonarán el mejor diseño, la solución más disruptiva al reto o la mejor presentación.

Presentación

Esta primera Liga Maker Drone fue presentada ayer por el presidente de la Fundación Barrié, José María Arias Mosquera, y el director general del ITG, Carlos Calvo Orosa.

Era Arias quien destacaba que el concepto “liga” no hace referencia a competición, sino a la unión para poder avanzar y evolucionar.

Tanto Arias como Calvo ponían de relevancia la necesidad de cambios de paradigma en la educación, donde se deben dar pasos hacia campos como la robótica, o la impresión 3D, “para no perder el tren” de los futuros cambios en la sociedad. Estas propuestas educativas a través de los drones permitirán “descubrir los secretos de estas tecnologías” con “las mentes más adaptadas”, apelaba Arias.