El concejal de Turismo, Juan Ignacio Borrego, aseguró ayer que hay avances en cuanto al futuro más próximo del aeropuerto coruñés. En concreto, dijo que la interlocución con las compañías aéreas “es permanente”, pero “la planificación de las líneas no se hace de un día para otro”.

El portavoz del departamento de Turismo confirma así que desde el Gobierno local están en contacto con las aerolíneas, coincidiendo ahora con el arranque de la ruta con Menorca operaba por Volotea. “Habrá más noticias de próximas conexiones e incluso alguna licitación que estamos preparando porque estamos viendo que el mapa de interés de Alvedro y de A Coruña en el resto de compañías empieza a ser igual de interesante que lo que era hasta 2019”, adelantó Borrego.

Durante su intervención, en la plaza de María Pita, quiso aprovechar para ser tajante: “Sacaremos la potencia de Alvedro hasta el infinito y más allá”.

Moción para el pleno

El PP presentó ayer una moción para el pleno de hoy en la que insta al Gobierno municipal a realizar gestiones con Aena para evitar el cierre en horario nocturno del aeródromo de Alvedro, ya que implicaría problemas con los vuelos de primera y de última hora, con las operaciones para trasplantes de órganos y pondría en peligro numerosos puestos de trabajo.

“Los coruñeses hemos conocido la decisión de Aena de abrirse a negociar el cierre en horario nocturno, de 23.00 a 07.00 horas, en respuesta a alegaciones presentadas tanto por el Gobierno municipal como por el BNG, ambos de Culleredo, entre otros”, refleja la moción de la formación.

“Esto implica que, de los cinco turnos de trabajo con los que cuenta Aena, el último desaparecería, con lo que se eliminarían los empleos vinculados (unos diez directos y treinta indirectos)”, destacó la portavoz del PP en A Coruña, Rosa Gallego.

El comité de empresa ya ha manifestado su preocupación porque la reducción horaria implique problemas con los vuelos de última hora, los que salen desde las 22.00 horas, y también a los de primera hora, “por lo que no tendríamos opción a los vuelos de negocio de ida y vuelta en el mismo día. También manifiestan que supondría un gran problema para los vuelos con órganos para trasplantes, donde el tiempo es un factor determinante”, señaló Gallego.

Este cierre, dice, “nos situaría en un ritmo anterior a 2006”, año en el que se consiguió ampliar el horario. “Perderíamos competitividad y se limitarían las posibilidades de recuperación tomando decisiones que sólo conducen a la reducción del nivel operativo del aeropuerto, como ya sucede con la pérdida de la conexión con Heatrhow, la supresión de la base de Vueling y la decisión de esta compañía de rescindir el contrato con el Ayuntamiento”.