Aunque, como es lógico, su entrenador Borja Jiménez pretenda preservarlo del ruido y la sobreexposición mediática, la progresión de Noel López en el fútbol de élite sigue derribando puertas partido a partido.
El canterano todavía en edad juvenil —18 años— exprime las oportunidades de las que dispone con el primer equipo con sobredosis de desparpajo y goles; no en vano, en apenas 22 minutos ha logrado anotar dos dianas que han evidenciado un talento espectacular e impropio de un futbolista tan joven.
En el envite inaugural de la temporada, en Riazor frente al Celta B, saltó al campo en el minuto 83, ya con el resultado encarrilado. El de Silleda rubricó un golazo, tras regate sensacional al portero vigués y disparo eléctrico a las mallas. Los más atrevidos llegaron a comparar al ‘27’ con Bebeto.
Después de haber sido convocado para la Selección Española Sub-19 y de que su figura fuese explotada por el conocido humorista Xosé Antonio Touriñán —fueron recaudados más de 43.000 euros en patrocinios para la cantera en apenas 24 horas—, Noel volvió a causar sensación desde la banqueta en La Planilla. También irrumpió en el partido en el minuto 83 y, también en tiempo añadido, regaló un tanto en el que puso sobre el tapete su sangre fría y virtuosismo.
Tras pase de Aguirre, sentó a un defensa del Calahorra y anotó sin oposición, dejando constancia de su clase y osadía, para inmediatamente fundirse en un cálido abrazo con una afición enfervorecida, que tiene muchísimas esperanzas depositadas sobre él.
Su celebración, sacando la lengua fuera, y con una sonrisa de oreja a oreja, ha sido uno de los momentos inolvidables que ha dejado este arranque de temporada, en el que Noel sigue pidiendo más presencia de manera regular.
La pasada semana en los entrenamientos de Abegondo, su técnico lo incluyó como titular en varias probaturas tácticas de equipo, si bien hasta el momento no ha apostado por él de inicio.
Sin duda, con el paso de las jornadas y el devenir de la competición, Noel dispondrá de opciones para continuar maravillando a un deportivismo que ya lo adora.
Con contrato en vigor con la entidad de la Plaza de Pontevedra hasta 2022 —y las dudas que ha dejado la estampida de otro canterano como Guille Bueno—, el entorno del equipo suspira por su blindaje y renovación.
Los cantos de sirena procedentes de conjuntos de mayor calado como el Espanyol, de la Liga Santander, ponen en riesgo la permanencia de una de las perlas de la cantera que más ilusión han generado en la última década.