El Deportivo está inmerso en un tramo duro del calendario a domicilio. Empezó a empinarse en la anterior salida, ante el Racing de Santander en El Sardinero, con un empate sin goles que permitió a los blanquiazules mantener la media inglesa (ganar en casa, empatar fuera) e igualar en la siguiente jornada, con la victoria ante el Zamora, en la cabeza de la tabla a otros tres conjuntos (Unionistas de Salamanca, que jugó ayer, el Racing de Santander y la UD Logroñés).
Tl y como indicó su entrenador, Borja Jiménez, llega “una parte del calendario” en la que juega “con casi todos los equipos de arriba fuera de casa” y, por tanto, uno de los tramos “difíciles” del curso en una categoría en la que apenas hay distancia de puntos entre los clubes.
LA RACHA
Solo ha sumado un punto de los últimos nueve como visitante, en Santander
Los jugadores también incidieron esta semana en la oportunidad que se presenta en Las Gaunas de dar un golpe sobre la mesa a domicilio. No en vano, llevan tres jornadas consecutivas como visitantes sin lograr la victoria. La temporada había comenzado con triunfos ante el Tudelano (0-1) y el Calahorra (0-3), pero la serie se truncó en su visita a Unionistas de Salamanca (2-1) en el Reina Sofía.
Después de esa derrota, llegó otra por idéntico marcador ante el Real Unión de Irún (2-1) y el empate de Santander, donde pudo ganar con el mano a mano que perdonó William de Camargo y también pudo perder porque los cántabros dispusieron de ocasiones para quedarse los tres puntos.
Ahora, el Deportivo visita otro campo mítico, al que regresa 24 años después, el de Las Gaunas, y lo hace con esa intención de regresar al camino de la victoria, que perdió de vista tras el triunfo de Calahorra el pasado 11 de septiembre.
Además del escenario, enfrente estará uno de los gallitos de la categoría, un recién descendido de Segunda División que tiene los mismos puntos que los de Borja Jiménez: veinte en diez jornadas.
Después de Las Gaunas, el Deportivo regresará al Estadio Abanca-Riazor para recibir en él al Extremadura de Manu Mosquera y visitará al Rayo Majadahonda en el Cerro del Espino dentro de dos semanas (domingo 21 de noviembre a las 12), otro rival y otro campo de los que han formado parte del fútbol profesional español, aunque en el caso de los majariegos, durante poco tiempo.
El Majadahonda, como la UD Logroñés, forma parte de los colíderes de la categoría de bronce después de diez jornadas.
Posteriormente, los blanquiazules jugarán con el filial del Athletic Club en Riazor y afrontarán un duelo de rivalidad provincial, el que le enfrentará al Racing de Ferrol en A Malata el sábado a las 19 horas.
Es uno de los partidos marcados en rojo en el calendario. Los ferrolanos son, por ahora, los más fuertes del grupo I como visitantes, pero no han conseguido la misma solidez delante de sus aficionados (En a Malata solo han conseguido cinco puntos).
El choque con los verdes será el antepenúltimo de 2021 para el Deportivo en la categoría de bronce. Ahora mismo, les separan en la clasificación cinco puntos (20 los herculinos y 15 los ferrolanos).
El domingo 12 de diciembre a las 17 horas, el Deportivo recibirá en Riazor al filial del Valladolid Promesas, que está en posiciones de descenso, y cerrará el año natural el fin de semana del 19 de diciembre como visitante en el campo de la Cultural Leonesa, otro de los partidos que, en principio, movilizarán a los aficionados blanquiazules. El Reino de León les espera. Otro de esos escenarios que han acogido partidos del fútbol profesional en las últimas temporadas. En su caso, un curso con el expreparador deportivista Rubén de la Barrera como técnico del equipo.
Después de un cuarto de temporada, el Deportivo suma siete puntos en sus desplazamientos, tres menos que el Racing de Ferrol. En Riazor, los de Borja Jiménez han mostrado fortaleza. Solo les marcó la SD Logroñés, que se llevó un punto en el minuto 94 de partido.
Con 13 puntos, son los locales más fuertes junto a otros dos equipos del grupo I, el Racing de Santander y el San Sebastián de los Reyes.