La cuesta de enero se hará más empinada para los coruñeses tras el anuncio realizado este viernes por el Ayuntamiento tras celebrarse una Junta de Gobierno local extraordinaria. Los impuestos y tasas municipales subirán un 3% en 2024, algo que en algunos casos se podía intuir, como son las tasas de la basura, ya que entra en vigor una normativa que obliga a repercutir todo el gasto de la recogida y tratamiento de desperdicios a los contribuyentes.
La decisión de modificar y actualizar 29 ordenanzas fiscales tendrá que ser aprobada en el pleno para su entrada en vigor y obedece a la necesidad municipal de contar con recursos suficientes para afrontar el gasto creciente de los servicios públicos e inversiones en la ciudad. El PP adelantó ayer que no apoyará la medida, al considerar la subida como “indignante e injustificada”.
Una parte importante de las tarifas que se prevén modificar son las relativas a las tasas por prestación de servicios municipales, un total de diecisiete y que tendrán un ajuste general del 3 por ciento. Las tarifas recogidas en estas ordenanzas no han sido actualizadas, en la mayoría de los casos, desde 2013, con alguna que no varía desde 2009. Es el caso del Índice de Precios al Consumidor (IPC), que desde el 2013 tuvo un incremento acumulado del 21,6%. El Gobierno municipal señala que la modificación aprobada ayer es “siete veces menor que la subida del IPC desde la última actualización”.
Dentro de las tasas por prestación de servicios municipales se incluyen la tramitación o expedición de documentos administrativos; los servicios especiales de vigilancia de espectáculos o transportes; la recogida y tratamiento de basura y residuos; la red de alcantarillado; la extinción de incendios; cementerios municipales y servicios fúnebres; sanidad preventiva, relacionado con animales de compañía y otros servicios de prevención; licencia de primera ocupación; licencias o autorizaciones para industria ambulante; licencia de servicios urbanos de transporte; inmovilización y retirada de vehículos; instalaciones deportivas municipales; museos y otras instalaciones culturales; estación de autobuses; catálogo de servicios domiciliarios; ocupación de suelo público con quioscos; y servicios en los mercados municipales.
Otra de las novedades afectará al Impuesto sobre Bienes e Inmuebles (IBI), que subirá un 3%, de forma que será del 0,63% para suelos urbanos y rústicos, manteniéndose el 1,3% para inmuebles de características especiales. En el caso de los inmuebles de naturaleza urbana que superen el valor catastral fijado para cada uno de sus usos, a excepción del residencial, se aplicará un gravamen del 0,83%.
En este apartado se incluye un recargo a las viviendas desocupadas del 50%, con el objetivo de aumentar la falta de viviendas en la urbe. Se aplicará a los inmuebles que permanezcan vacíos más de dos años y pertenezcan a titulares con cuatro o más inmuebles de uso residencial. Con esta actualización A Coruña sigue teniendo un IBI menor que Vigo, Pontevedra y Lugo.
La ordenanza reguladora de las tasas de terrazas llevaba sin actualizarse desde 2013. Aquellos locales que presenten una terraza cerrada o en zona de aparcamiento pasarán a aplicar el 1,20 de coeficiente, un 20% menos que en la anterior ordenanza.
La tarifa mínima será de 60,67 euros. Además, la tarifa anual aplicada por metro cuadrado pasa a ser de 25 a 60 euros y, en el caso de la temporada que abarca desde el 1 de abril al 30 de septiembre, aumenta de 15 a 30 euros. Por otra parte, en el impuesto sobre vehículos de tracción mecánica (IVTM) tendrá un coeficiente de 1,545 para turismos de menos de ocho caballos y ciclomotores y motocicletas hasta los 125 centímetros cúbicos y de 1,837 para el resto de vehículos. Se aplicará una bonificación del 60% para ve híbridos, de motor eléctrico o cero emisiones, entre otros.