La primera noche de emergencia sanitaria no ha deparado muchas diferencias con respecto a las anteriores. Los contenedores han vuelto a arder en las calles coruñeses, obligando a los Bomberos a desplazarse a varios puntos. Estos incidentes se relacionan con la huelga del servicio de recogida de basura que ya dura un mes.
Sin embargo, esta noche pasada apenas se han registrado tres incendios, comparados con los ocho o nueve que se producían cada noche, lo cual es una buena noticia. El primero se produjo en la calle de Monasterio de Sobrado, donde el fuego en un contenedor afectó a un vehículo estacionado al lado. Eran las once de la noche, y el humo se había metido en el portal del edificio de enfrente obligando a los Bomberos a ventilar la escalera.
Aquel humo provocó una falsa alarma veinte minutos después, porque recibieron una llamada que alertaba de aquello. Pero no fue ningún error el que se declaró a las 02.40 horas en Marinaa Pineda. El contenedor amenazaba a dos motos estacionadas al lado, pero los dueños las retiraron a tiempo.
Finalmente, a las cuatro menos cuarto, en Eugenio Carre Aldao, se produjo el que sería el último incendio de la noche. Tres contenedores de ruedas ardían como teas a la llegada de los servicios de emerencia. EL calor afectó a un furgoneta estacionada justo al lado y al escaparate de un local cercano.