Con un respetuoso silencio sepulcral inició Manolo García su quinto concierto en solitario en el Coliseum de A Coruña. Por “respeto y solidaridad”, el cantante de Barcelona comenzaba su recital con un minuto de silencio por los afectados por la DANA, que solo se rompió para brindar una sonora ovación a todos los voluntarios que estos días trabajan en Valencia.
Antes del concierto, Manolo García explicaba en una entrevista a El Ideal Gallego que el repertorio recorrería sus nueve trabajos en solitario, pero que también haría guiños a su etapa de El Último de la Fila. Tanto fue así que la velada musical del Coliseum quedó inaugurada con ‘Insurrección’.
El recorrido de varias décadas de música, en el que no faltaron sus clásicos, continuó también con temas como ‘Diez mil veranos’ o ‘Nunca el tiempo es perdido’. El artista se encontró con miles de almas entregadas, que en la mayoría de temas le ayudaron a corear sus frases más icónicas.
Y si Manolo García repasaba décadas de trayectoria, no muy lejos otra formación mítica celebraba su aniversario. Y es que Camela y su legión de fans tomaban el Palacio de la Ópera para celebrar sus 30 años de carrera.
El dúo madrileño regresaba a la ciudad tan solo un año después de su última actuación, en esta ocasión para brindarse, y brindarle al público, un homenaje de cumpleaños. Los artífices de temas tan coreados como ‘Cuando zarpa el amor’, ‘Háblale de mí’, ‘Sueños inalcanzables’ o ‘Lágrimas de amor’ volvieron a conquistar el Palacio de la Ópera a base de clásicos que no parecen pasar de moda.