Esta semana aterrizó en la ciudad, por primera vez, el director dánes Thomas Dausgaard, para ponerse al frente de la Orquesta Sinfónica de Galicia hoy y mañana en el Palacio de la Ópera (20.00 horas). Lo hace en sustitución de Andrés Orozco-Estrada, que tuvo que cancelar su presencia por enfermedad.
 

En tan solo unas horas, tras los primeros ensayos, el director danés tenía clara su opinión sobre la OSG. “Es magnífica, son músicos maravillosos, es un placer hacer música con ellos”.
 

El programa de hoy y mañana lo protagoniza la sexta sinfonía de Mahler. “Me encanta la sexta de Mahler, en su conjunto”, asegura, mientras añade que “creo que componer era una suerte de terapia para Mahler, y en la Número 6 trataba de librarse de su culpa y dar espacio a su ‘niño interior’”. “Sin embargo, una maldición parece cernirse sobre él y, en última instancia, conduce a la destrucción en esta obra”, asegura.
 

Durante su trayectoria, ha podido vivir la música en diversas partes del mundo. Y en ese camino ha podido ver las diferencias entre públicos: “La música tiene un significado diferente en las distintas culturas, el público se comporta de forma diferente”, indica, pero eso “es superficial”, lo importante es que “siempre que uno experimenta la escucha entregada del público, es una inspiración”. 
 

Ahora, ha sido nombrado principal director invitado de la Orquesta y Coro de RTVE. “He disfrutado mucho con ellos durante diez años y espero una colaboración más estrecha en el futuro”, augura.

A través de su programa ‘Roots’ aproxima la música clásica a otros géneros y sonidos. “Mahler es un buen ejemplo de incorporación, no sólo de música folclórica, sino también de sonidos del campo”. En definitiva, lo tiene claro: “La música es el lenguaje del alma”.