Por el puerto de A Coruña han sido multitud las personalidades que han pasado. Hace unos meses recordábamos el fugaz paso por nuestras tierras de dos futuros presidentes de Estados Unidos (John Adams y su hijo John Quincy Adams). Pero hay otras personalidades cuyo rastro fue más fugaz e incluso difuso.
Uno de esos casos es el del físico alemán Albert Einstein, que, tal y como recordó este pasado fin de semana Martin Pawley en la web de la Asociación Cultural Alexandre Bóveda, dejó constancia en sus diarios de su paso por la urbe.
Fue un 9 de marzo de 1925, tal y como reflejó en su diario de viaje, donde dejó patente que su paso por la urbe herculina duró apenas unas horas, sin aclarar si llegó a tomar tierra o no. “Casi todo el día al sol”, comenzaba escribiendo Einstein, que añadía: “Atracamos en Coruña por la mañana, en Vigo por la tarde, una bahía rodeada de islas accidentadas, con pintorescas aldeas”. Tras una conversación sobre lógica que el físico no reflejó en el diario, Einstein se mostró asombrado por los “colores resplandecientes” del ocaso vigués, “inolvidable”. “El sol del sur es embriagador”, apuntaba antes de su marcha.
Einstein iba a bordo del buque ‘Cap Polonio’, de la Compañía Hamburguesa. Su paso por Galicia correspondía a una ruta que posteriormente pasaría por Lisboa, antes de emprender rumbo a Sudamérica.
En su habitual crónica del paso de barcos por aguas coruñesas, El Ideal Gallego reflejaba el 10 de marzo el paso del ‘Cap Polonio’, pero no el de su afamado tripulante. El periódico de aquel día resumía el fondeo del buque, que dejó un pasajero en tierra, mientras permanecían en él otros “672 en tránsito”. “Después de tomar 30 pasajeros, zarpó dos horas más tarde para Vigo y puertos de Sudamérica”.
El ‘Cap Polonio’ era un habitual de la dársena herculina, conectando ambos lados del Atlántico. La prensa de la época relata que a bordo de este buque viajaron personalidades relacionadas con la realeza, literatos e incluso el cónsul de Argentina en A Coruña.
Einstein cruzó el Atlántico y, entre otros lugares, visitó Argentina. Cuenta de ello da la Sociedad Fomento de Porriño y su distrito, una entidad creada en Buenos Aires en 1916 por los emigrantes porriñeses que allí residían.
En el boletín de abril de 1925 relataban parte de su estancia. “Como es del dominio público, se halla en esta capital desde hace unos días el eminente físico Dr. Alberto Einstein, autor de la relatividad, la nueva concepción de la ciencia que viene a conmover las bases y principios que durante siglos se consideraron inmutables”. “El conocido sabio alemán” dio una serie de conferencias, relata el texto de la sociedad, que culmina: “Unimos nuestras modestas voces a las entusiastas aclamaciones con que es recibido”.