En torno a las 13.00 horas de la pasada jornada dominical, una vez finalizada la misa, decenas de personas se concentraban ante la sede de la orden de los Capuchinos, en la calle de Federico Tapia, para solicitar que no se clausure el convento y que no se traslade a los dos religiosos que quedan en él.
No solo los feligreses que acudían al oficio se congregaron a las puertas, sino que al lugar acudían también vecinos del entorno, para mostrar, además, su apoyo a los padres Rosendo y Tejerina.
“No pensaba yo que habría tanta gente deseando colaborar para que me quede”, afirmaba el padre Rosendo ayer tras la concentración. “Constantemente tenemos llamadas, las firmas o estas manifestaciones... Pero la gente se ha volcado totalmente”, indicaba sobre el apoyo que están recibiendo.
Con este movimiento social esperan que la orden se replantee la idea que se les comunicó en las últimas semanas, que sería el cierre del convento y el traslado de ambos religiosos a otro centro capuchino, aunque aún desconocen a cuál sería.
Movimiento social
Los vecinos y feligreses ya llevan días recogiendo firmas y colgando carteles contra este traslado, los más grandes situados en la entrada de la iglesia.
Ayer salían a las puertas con grandes pancartas en las que se podían leer variados mensajes como “no al cierre del convento, esta es nuestra casa” o “más de 100 años haciendo comunidad con nosotros y ahora nos los queréis llevar”.
En tamaño más pequeño, los vecinos llevaron también sus propias proclamas, tales como “para estar todos contentos, no nos cierren el convento”.
Y es que los vecinos y feligreses de la zona tienen un especial vínculo con esta institución, que ha creado una fuerte comunidad a su alrededor, no solo en el apartado estrictamente religioso, como los grupos de catecismo o los propios oficios religiosos, sino también en el ámbito benéfico, con los grupos de Cáritas, o en el cultural, con los diversos coros juveniles y los grupos artísticos nacidos al amparo de la institución religiosa.
También son conocidas otras actividades, como la ya tradicional procesión de la Borriquilla, que se sucede cada Semana Santa en la ciudad.
Recogida de firmas
Durante los últimos días, los vecinos y los feligreses se han puesto en marcha para recoger firmas con las que pedir el replanteamiento del traslado.
En la jornada de ayer, la concentración recibió el apoyo del grupo municipal del Partido Popular, a través de su portavoz en la corporación local, Rosa Gallego, que acudió al acto.
Además, desde el PP señalaban ayer que pondrán a disposición de los vecinos su sede en la calle de Sánchez Bregua para seguir recogiendo rúbricas con las cuales solicitar que no se cierre el establecimiento religioso de Federico Tapia.