Un total de 21 asociaciones, plataformas y comunidades vecinales hicieron público un manifiesto conjunto en el que solicitan la creación de “tres grupos de trabajo, formados por expertos en seguridad, movilidad y medio ambiente, para buscar soluciones viables a los problemas transversales” que observan en sus barrios. Para ello instan a las diferentes administraciones e instituciones de la ciudad a implicarse en la configuración de comisiones mixtas cuyos resultados sean compartidos y transmitidos al movimiento asociativo.
Gobierno, Xunta, Ayuntamiento, Universidad de A Coruña y Diputación, así como sindicatos y “asociaciones privadas especializadas en cada una de las tres áreas” son convocadas por las asociaciones y plataformas firmantes para dar un paso al frente en aspectos que dicen preocupar especialmente a los vecinos. Suscriben esa perspectiva Orzán-Pescadería; Monte Martelo; Luz de Mar; Castro de Elviña Rexumeiros; A Falperra; Sagrada Familia; O Castrillón O Cruceiro; Sector 7 Recinto Ferial; Barrio de las Flores; Monte Alto Atochas; Elviña II Fase; A Zapateira; Plaza del Comercio; Los Rosales; Riazor-Estadio; Juan Flórez Ensanche y Nostián, así como las plataformas Viviendas Agra dos Mallos; Casas de Franco y Os Mallos, además de la comunidad de viviendas de la calle Vizcaya número 58. Según dice el comunicado, además, los firmas “manifiestan su preocupación ante hechos y gestiones del Gobierno municipal” y deciden dar el paso adelante después de haber “protestado” y “concentrándose en multitud de ocasiones”. Entienden que la protesta por separado “suele tener poca respuesta y su efecto permanece muy poco en el tiempo”, por lo que apuestan por la “unidad” para hacerse “oír en el Ayuntamiento y ante organismos oficiales”.
Critican las 21 entidades que suscriben el acuerdo la escasa repercusión de sus demandas en las diferentes interlocuciones con María Pita. “Hemos visto cómo el Gobierno municipal hacía oídos sordos ante nuestras propuestas, críticas, demandas y las distintas necesidades que teníamos”, explican. “Sen nos decía que se reunían con nosotros y no era cierto, que tomarían nota y nada se hacía, que se ejecutarían y seguimos esperando”, lamentan, además de criticar que en muchos casos “la decisión ya estaba tomada”.
La lista de aspectos por los que muestran su intranquilidad es larga y diversa: “Robos, incendios, vandalismo, trapicheos, inseguridad, ruidos, terrazas, salubridad, okupación, narcopisos, fiestas en los barrios, la falta de vivienda, limpieza, mobiliario urbano, movilidad, falta de mantenimiento, recursos materiales y humanos en los museos, colegios, biblioteca, Palacio de la Ópera, ascensor panorámico, pabellones, jardines, parques, el jardín de San Carlos, aceras, pavimento, precariedad del servicio de recogida de basura, la planta de Nostián, autobuses y otras concesiones sin ejecutar, la falta de efectivos policiales y un largo etcétera que afecta a todos los ciudadanos”.
Muchos de los protagonistas de la iniciativa son los fundadores del llamado ‘grupo de las firmas’, una unión entre asociaciones que comenzó con 7 barrios y que dio entrada mediante registro a 5.000 firmas en pos de un mayor despliegue de seguridad. Desde aquel 23 de agosto de 2023 el número ha crecido hasta los 21 ‘socios’ y por ello también apelan a la Federación vecinal a unirse a ellos. De momento no darán el paso para convertir el manifiesto en manifestación pública, pero piden un paso al frente por parte de la administración. “De momento, se presenta por registro y esperamos a que se manifieste el Ayuntamiento”, puntualiza uno de los firmantes.