El árbol judío que acompaña a la sinagoga de A Coruña desde hace al menos un siglo

Junto a la sinagoga luce un sauce. No es excesivamente grande, lo que denota juventud, pero esa especie parece que siempre ha estado ahí. Así lo muestran documentos del siglo XX y una investigación municipal, que ha encontrado referencias al árbol en el XIX
El árbol judío que acompaña a la sinagoga de A Coruña desde hace al menos un siglo
El sauce que luce en la calle Sinagoga | Patricia G. Fraga

El metrosidero de Orillamar, árbol ‘senlleiro’, es considerado el de más edad de A Coruña. Pero la ciudad ha tenido siempre vinculadas a determinadas zonas una serie de árboles característicos: las moreras de San Andrés o los olmos de San Carlos son dos ejemplos. Pero hay otros, que siempre han estado ahí, aunque el motivo no sea del todo claro, como es el caso del sauce de la calle Sinagoga.
 

No hablamos de un árbol mayor, pero sí de una misma especie que con el paso de los años se ha replantado en el mismo lugar. El actual es de este milenio, pero podemos encontrar indicios de un sauce en la calle Sinagoga desde hace más de un siglo, concretamente, ya a finales del XIX se referencia la existencia de esta especie en esta pequeña plazuela junto a lo que se estudia si es una mikvé y junto al mesón que, precisamente, lleva el nombre de ‘El Sauce’. 
 

En concreto, los servicios arqueológicos municipales tienen datado un dibujo a lápiz del sauce junto a la sinagoga de los años 90 del siglo XIX, lo que hace pensar que su estancia es aún más larga en el tiempo. Aunque su autoría no está clara, El Ideal Gallego, en 1952, aludía en un comentario sobre una exposición de José Seijo Rubio “dos hermosos dibujos en lápiz azul”, uno de ellos: ‘El sauce de la sinagoga’.
 

Dibujo sauce sinagoga 18020798
El dibujo que estudian los servicios arqueológicos municipales | AEC

 

Dicho sauce llegó a ser incluso una referencia turística. En el Boletín Municipal de Turismo de 1932, llama la atención la referencia a “un árbol prócer que se alza solitario frente a una vieja sinagoga escondida en el recodo de una calle en cuesta” en un texto sobre las bonanzas de la Ciudad Vieja. 


Años antes, en ‘Galicia industrial y comercial’ de mayo de 1926 figura también una imagen de la calle Sinagoga en la que se aprecia este ejemplar.

 

Referencias judías

El motivo por el que el sauce esté al lado de la sinagoga no está del todo claro. Pero que históricamente haya habido un sauce en la zona refuerza la tesis que defienden los estudiosos municipales de la existencia de la sinagoga. Además, el trazo de este tipo de árboles en la tradición judía se remonta a un pasado remoto. 
 

En el Libro de los Salmos ya se citaba a esta especie, aunque existe una cierta controversia por lo que en su día se consideró una mala traducción, por lo que posteriormente se cambió el término ‘sauce’ por ‘álamo’. En concreto, era el salmo 137, según la numeración hebrea, el que tenía escrito: “Junto a los ríos de Babilonia // nos sentábamos y llorábamos // al acordarnos de Sión. // Sobre los sauces en medio de ella // colgamos nuestras arpas”.
 

Pero la tradición judía guarda más espacios para el sauce. Existe una festividad denominada ‘Sucot’, en la que se crean una suerte de ramos con cuatro especies, todas ellas con un significado simbólico diferente. Una de esas especies que se utilizan son las hojas de sauce que, grosso modo, se podría decir que representan la humildad. 


Pero uno de los vínculos más recientes y conocidos en Europa es el llamado ‘Árbol de la vida’, situado en el parque memorial del holocausto ‘Raoul Wallenberg’, en la parte trasera de la Gran Sinagoga de Budapest. Se trata de un enorme sauce llorón cuyas hojas, plateadas, rinden homenaje a los cientos de miles de judíos asesinados durante la II Guerra Mundial. Una de las mayores donaciones para llevar a cabo este acto de memoria la realizó en su día el actor Tony Curtis, que en los años 90 creó la Emanuel Foundation. 

El árbol judío que acompaña a la sinagoga de A Coruña desde hace al menos un siglo

Te puede interesar